Aunque tener a la mayor parte de la familia lejos sólo tiene aspectos negativos, te permite, como lado positivo, poder enviar y recibir paquetes llenos de regalos.
Me encanta abrir el buzón y encontrarme, por sorpresa, un paquete.
Hace unos días, le envié un sobre bien grandote a mi prima que contenía:
Una pulsera y dos pines con el símbolo de la paz en rosa
Un pañuelo gris y blanco
Una camiseta con estampado floral
Un vestido floreado con negro